Salin-de-Giraud debe escribirse. No espera usted encontrarse con este perfecto pueblo proletario en medio de Le Camargue. Lo de proletario sin literatura. Fue así desde su fundación en 1856. Sigue siendo un pueblo obrero y cosmopolita que a traves de generaciones se ha nutrido de explotados armenios, españoles, rusos, bálticos… que se dedican a recoger la sal del mediterráneo.
En Salin-de-Giraud el uso era y es
mayormente industrial. Lo que no quiere decir que en Le Camargue no le vendan
la misma sal en paquete perfecto y pequeño a precio de langosta. Coma la
langosta y deje la sal. Bajo el nombre La Ballena se la venden en el
supermercado por 3 euros/ kg.
No deje de acercarse a la playa de
Piemanson, uno de los pocos lugares de Francia donde podrá hacer camping
salvaje a la orilla del Ródano como alguna vez fue. Aquello es la naturaleza
que todavía queda a un paso de los
restaurantes donde saciar la necesidad de chupar la sangre de toro que a todos
les entra. Aunque les confieso que con tanto mar por delante sigo no
entendiendo la elección. ¿Sera el exceso de sal que les pone hipertensos
mentales?
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