Debería de saber que los congrios, un suborden de los anguilliformes, son esos peces que asombran en las pescaderías y asustan en el mar. Escondidos
en su cubil, entre rocas y algas, esperan pacientemente a que pase por delante
la presa. Oportunistas máximos, no se molestan ni en buscar la noticia, perdón
la comida. Cuando se les pone en bandeja, violentos, traidores, insaciables en
la mordida, arrastra al agujero al despistado que se puso a tiro.
Incluso a submarinistas. Los que de cuando en vez tenemos el vicio de
descender a contemplar el paraíso bajo las aguas ya nos hemos llevado mas de un
susto cuando de la nada ves salir esos dientes que te buscan.
Pues eso, asociación libre decía el imbécil de Freud. Lo que se me
ocurre cuando leo a los neofascistoides de la Voz de Galicia tratando el asunto
de la niña china asesinada en Compostela. O los puristas del liberalismo
hispano de El País, que se diferencian en la forma pero no el tono. Dan
asco.
Los que vivimos en centro Europa no entendemos esto. Esa cosa que se
llama la presunción de la inocencia no es el eje fundamental de evitar el
despiece del acusado como creen muchos gacetilleros. Hay una norma mucho mas
elemental que en estos pagos se les da con la cuchara de la Maizena a sus
habitantes. Eso que simplemente se llama privacidad. Eso que evita que un
joputa de uniforme guardiocivilero se ponga a comentar en los bares de la zona
lo que dicen e inventan.
Estos días, desde el bar del camping compostelano cercano al cuartel
de la Benemérita, había todas las noches retrasmisión diferida de los cotilleos
de Compostela. Mientras los plumillas, congrios sedientos, pagaban vinos y
pulpo, ¡pero hombre que estamos de servicio!
No veas el largo peregrinaje que les queda para hacerse europeos. Aprender
de Europa. Esos lugares con una cultura que dice que los chismes no interesan.
Lo único que cuenta es la evidencia. Eso, lo que todavía no han encontrado a
pesar de que ellos le han dado a la chusma el veredicto. D.E.P.; a nena
No hay comentarios:
Publicar un comentario